Celdas solares fotovoltaicas orgánicas: uso de la energía solar para un mejor futuro en el medio ambiente

En la actualidad hablamos del tema de reciclaje y cuán importante es, así como se han buscado alternativas que mejoren la calidad de vida en el planeta, por ejemplo la aplicación de la química verde, que es el empleo de la tecnología química reduciendo a la mínima cantidad posible las sustancias tóxicas y desarrollar procesos limpios y sustentables; el Dr. Juan Matos Lale de la Universidad de Concepción, Chile, junto con el Dr. René Rangel de la División de Ciencias Ambientales del IPICYT, organizaron el Curso Taller: Generación de nuevos materiales para Celdas Solares Fotovoltaicas Orgánicas que dio sede en el IPICYT este mes de mayo, así que aprovechamos para hacerle una entrevista y que nos platicará un poco más sobre el tema de celdas solares orgánicas.

El Dr. Juan Matos y su equipo de investigación, trabajan utilizando residuos de biomasa, por ejemplo: cascaras de arroz, conchas de los cocos, aserrín, paja de trigo, almidón de azúcar, de los cuales se extraen residuos y cuyo siguiente paso es procesarlos con agua y etanol para extraer moléculas químicas de interés: polisacáridos, terpenos, aceites, entre otros y, utilizarlos en productos ecológicamente útiles, en este caso: creación de celdas solares orgánicas.

Pero, ¿Qué son las celdas solares orgánicas?, son aquellas donde algunos materiales inorgánicos que son bioinertes (como el dióxido de titanio, comúnmente llamado Titania), lo combinamos con algunos residuos de biomasa e incorporamos átomos de carbono dentro de la Titania; existen algunas que son sensibilizadas con pigmentos naturales como extractos de semillas y/o de algas marinas. Lo que se busca al crear celdas solares orgánicas es que sean más eficientes, más económicas ya que se utilizan métodos de síntesis sencillos y además se contribuye al ámbito de la química verde.

El sector industrial ha tenido que trabajar con procesos sostenibles, esperando que cada vez haya menor consumo se combustibles fósiles e incrementar el consumo de energías renovables, por ejemplo: hidrogeno, energía eólica, energía solar. Como ya lo mencionábamos anteriormente el uso de energías limpias y en este caso de energía solar es una buena apuesta para la producción en el sector industrial.

En IPICYT el Dr. Juan Matos Lale junto con el Dr. René Rangel, Jefe de la División de Ciencias Ambientales, están produciendo sólidos que son necesarios para el funcionamiento de las celdas solares orgánicas, a partir del uso de biomasas, creando celdas solares orgánicas dopadas con carbono, llamados Carbon dots, así ya no es necesario tener que importar de otros países los materiales para el funcionamiento de éstas.

Países Europeos, USA, China y Corea principalmente, han ido progresivamente aumentando el uso este tipo de procesos limpios ya que al desarrollar la energía solar se genera energía limpia y eficiente, de bajo costo y se beneficia al medio ambiente.

Las metas a futuro en esta área apuntan a dejar de utilizar métodos de síntesis donde se utilicen gases tóxicos, por ejemplo las celdas solares de capa fina de silicio u otros elementos son elaboradas con gases que emiten contaminantes sumamente tóxicos, por su parte el equipo de investigadores y técnicos con los que trabaja el Dr. Juan Matos utilizan equipos sencillos, económicamente viables y energías limpias.

Por último, el Dr. Matos Lale dijo que la idea es sembrar en los más jóvenes el gran beneficio que traería para la humanidad, generar conciencia hacia la producción, desarrollo y uso de energías limpias, tal vez nos tomará varios años llegar a ese compromiso, pero es importante generar legislaciones y políticas socio-educativas, que apunten en esa dirección.

Subdirección de Planeación y Comunicación Social / eventos@ipicyt.edu.mx

Lugar: San Luis Potosí, S.L.P.